La dificultad se mide en Watios


P = W / t,

es decir,
Potencia = Trabajo partido por tiempo.

Cuanto más trabajo deba hacerse y menor sea el tiempo disponible, más dificil será la tarea. Un equipo con mucha potencia podrá hacer cosas complicadas en poco tiempo. No así un equipo poco potente.

1. Procurarás tener un equipo de alto rendimiento, escogiendo bien a tus colaboradores, e invirtiendo en su formación y su motivación.

2. Negociarás fechas realistas para poder tener hechos los deberes. Ni el mejor equipo del mundo resiste, sin daño, ser derrotado tras haber fallado un objetivo inalcanzable.

3. Primero pídele una fecha al que tiene que hacer el trabajo, y busca su compromiso. Si logra su objetivo, reforzará su credibilidad. Si falla, será su honor el que se resienta por la promesa no cumplida. Si no te parece correcta la fecha, puedes negociarla. Pero primero, pídesela al que tiene que desempeñar la función.

3. Dirás NO. Encontrarás gente insaciable, externa a tu equipo, capaz de generar día tras otro necesidades sin descanso, no necesariamente de gran valor, y que pretenderá arrancar nuevos proyectos asíncronamente sin medir los recursos, y sin considerar que debes acabar primero el trabajo que ya tienes en cartera.

4. Valora el tiempo de creación y el de M A N T E N I M I E N T O de nuevos proyectos. ¿Cuántas veces se hacen trabajos titánicos, explosivos, por fuerza bruta, y que pocos meses tras su implantación se convierten en basura porque el tiempo y coste de mantenimiento es inasumible?
Lo sencillo y rápido es hacer chapuzas que son difíciles y costosas de mantener.
Lo complicado y lento es simplificar para conseguir lo contrario.

5. Trabaja inviertiendo. Si tengo un problema que resolver, tardo 10 unidades de tiempo en dar solución inmediata, pero tardo 12 en resolverlo para siempre (documentando, informando, y corrigiendo el problema de base). Mis 2 unidades de esfuerzo adicional repercuten en que a partir de ese momento, el problema pueda ser resuelto por cualquiera en 1 unidad de tiempo (en vez de las 10 originales).

Lo dificil no es proponerse nuevas obligaciones y tener nuevas ideas, sino procurar que optimicen, simplifiquen, y terminarlas una vez se empiezan.

A mi equipo le inculco el siguiente eslogan: "Debéis hacer lo imposible para que nos tiren a todos a la calle, por ser prescindibles". Con esto quiero expresar que deben trabajar todos los días persiguiendo el objetivo de que lo que hoy cuesta 10, mañana cueste 1.

Obviamente, a un equipo que logre esto no le faltará trabajo nunca.

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