Cracks vs. Catalysts
Imagínate que eres empresario, arriesgas tus bienes por un proyecto y te rodeas de dos personas de confianza. A ambos les encargas crear un equipo de personas para dar cuerpo a una rama de la empresa. Despachas habitualmente con ambos, y observas lo siguiente:
- Uno de ellos, muy activo, demuestra una gran capacidad de trabajo. Da explicaciones sobre sus ideas y proyectos, siempre interesantes. Es evidente que la organización no puede prescindir de él. Es un crack.
- En cuanto al otro, no está claro dónde se mete, pues no suele esforzarse excesivamente en ser visible. Eso sí, cuando tienes ocasión de entrevistarte con él, te cuenta todas las buenas ideas y proyectos que su equipo ha propuesto y culminado. Él se esfuerza en hacer evidente que la organización no puede prescindir de sus colaboradores. Es un catalizador.
¿Quién te merece más confianza?
- Uno de ellos, muy activo, demuestra una gran capacidad de trabajo. Da explicaciones sobre sus ideas y proyectos, siempre interesantes. Es evidente que la organización no puede prescindir de él. Es un crack.
- En cuanto al otro, no está claro dónde se mete, pues no suele esforzarse excesivamente en ser visible. Eso sí, cuando tienes ocasión de entrevistarte con él, te cuenta todas las buenas ideas y proyectos que su equipo ha propuesto y culminado. Él se esfuerza en hacer evidente que la organización no puede prescindir de sus colaboradores. Es un catalizador.
¿Quién te merece más confianza?
Comentarios